La vida de un animal en nuestro país, es muy distinta a la de uno que está en otro lado
Nuestros panas de Vía Multimedia nos echaron el cuento de que uno de los gatos más famosos de Internet tendrá su película para estas navidades, es decir, Grumpy Cat. El film está pautado para que salga este diciembre con el nombre “Grumpy Cat’s Worst Christmas Ever” y será protagonizada por Tardar Sauce (el verdadero nombre de la felina).
El film se trata sobre un gato que ha vivido toda su vida en una tienda de mascotas en un centro comercial y debido a toda esa roncha que sufrió en la espera de un dueño, desarrolló una personalidad totalmente negativa a la vida. Grumpy estará acompañado de Chrystal, una niña de 12 años la cual entra a la tienda y hace amistad de inmediato con el famoso gato ya que es la única que puede escuchar “su voz”. Tim Hill (Bob Esponja) y Jeff Morris están encargados del guión de la peli.
Probablemente se desarrollará en Estados Unidos, algo que nos ayuda a predecir que será una versión de “101 Dálmatas” pero con un solo gatito, ya que publicaron que la trama de la película tendrá algo que ver con secuestradores de animales.
Si esto sucediera en Venezuela, la historia sería muy distinta y aquí te decimos lo que cambiaría.
1. Grumpy Cat sería un gato rescatado de la calle
Vivir en las calles de Venezuela sí puede producir el odio por la vida que tiene este gato. Jugársela todos los días, buscar comida y evitar que te aplaste un camión en el camino endurece la personalidad de los animales.
2. No lo comprarían, lo adoptarían
Tal vez ni haga falta la presentación de una fundación o empresa formal que dé en adopción a animales rescatados de la calle, si la cosa fuese en nuestro país, Chrystal probablemente se enteraría de la vida de Grumpy Cat por una cadena de Whatsapp o Facebook.
3. Los villanos serían unos chinos
Eso de traficar animales es muy rebuscado para Venezuela, aquí tendrían que estar pendientes de no dejar al animalito solo por ahí para que los chinos no lo preparen para el almuerzo del día.
4. Pasarían roncha buscando la gatarina
Como en Venezuela nadie se pela de pasar trabajo para hacer mercado y alimentarse, Grumpy Cat no se salvaría de pasear con su nueva dueña para conseguir un paquete de gatarina que no cueste un ojo de la cara.
5. Grumpy pasaría una navidad relajada
En Estados Unidos pueden que celebren la navidad a todo dar, pero como van las cosas, aquí en Venezuela no alcanzará para llenar el arbolito de regalos si el dólar paralelo a esta altura del año a 97,81Bs. ¿Le gustará la patria? Tal vez no se sienta abrumado ya que le bajaríamos dos a la celebración porque no hay plata.
¿Qué más pasaría en la navidad de Grumpy Cat en Venezuela?
Con info de Vía Multimedia
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